martes, 22 de junio de 2010

volátil y roto cristal

Volátil y roto cristal en tus manos,
arcilla en tu boca e hilo de pescar entre
tus piernas.

Silbé a los dioses reclamando su ayuda,
pero no me escucharon porque soy
invisible ante la grandeza, siempre lo fui.

Bajé al infierno para recuperar mi voz,
pero acabé retorcida como un plástico
carbonizado, sin vida. No disimulemos,
son malos tiempos para ser Juana de Arco, ni
siquiera pude salvar mi corazón de la quema.

Resurjo poco a poco, cual sol renacido
o Ícaro reencontrado. Lamiendo los días hasta
desgastarlos, azotando fantasmas con lágrimas
ocasionales, volviendo a ser.

miércoles, 16 de junio de 2010

relámpagos desnudos

Fue como ver un millón de relámpagos
desnudos y desamparados, tendidos ante
la nada tarareando la última canción de moda.
Por entonces, la espuma de cada nuevo paso
era como una bocanada de locura con tostadas.
No, no era una mancha sobre el cielo. Era el sol.
El mismo de cada día o uno diferente cada nueva
mañana.
Caminé, caminé sobre un asfalto de cartón piedra
del que sobresalían manos y mujeres rotas.

martes, 8 de junio de 2010

grito

Grito, grito, le grito en silencio a las
ausencias y presencias que nunca tuve de
tus manos.
Asesinar flores a nuestra edad debería estar
penado y robar relámpagos para dejarlos
olvidados en el último rincón cuántico de la
nevera, prohibido.
Grito sordo, grito mudo, grito incoloro e
imposible. Arañé con el filo de la desesperación
las agujas del reloj y me hice pequeña, demasiado.
Me salvé de tus grilletes y ahora alimento a un
manojo de minutos a los que sacar de esta
parada cardiorrespiratoria a la que los abocaste.
¡Grito!

domingo, 6 de junio de 2010

vivir en la boca del lobo

Juego a doblarme las uñas dentro de
la boca del lobo. Estoy cansada de
bañarme en una ciénaga llena de miserias,
de ahogarme en mi propio yo sin encontrar
las baldosas rojas que deberían llevarme a la
salvación.
Ingiero azufre con sacarina para desayunar y
malacostumbro a mis abismos. Curo mis heridas
con sal para hacerme más fuerte y soy satélite
de la tierra en extinción.
Juego a vivir en la boca del lobo y hacer de ello
algo cotidiano para mi piel.

jueves, 3 de junio de 2010

libélula muda y ciega

Una libélula muda juega a las canicas con
el mundo.
Sácame punta, clávame en ti, dentro de ti y
fuera de ti.
Cavidades, a veces la vida huele a cavidades
silenciosas, a párpados sin voz, sin luz. A
ecos llenos de tus carencias.
Me rendí ante la evidencia del amor sin más
recursos que los de mi propia piel.
La libélula ciega azotó arena sobre mi ombligo
dejando todo el orden en desorden.
Caos. Fundido en negro. The End.

martes, 1 de junio de 2010

desde lo más alto

Vuelta a lamer la cicatriz como
si fuera un terrón de azúcar refinado.
Una sombra duerme conmigo. Acurrucada
gime entre mi esternón y mi hígado,
insomne.

La pesadez en la nuca y esta maldita
costumbre de soportar el propio mundo
sobre mis piernas.

No sé si te lo he dicho alguna vez,
pero eres bocanada viva y fresca de luz
cenital. Siempre alumbrando(me) desde lo más alto.

31/05/2010